Fuchi no Mori, es un área forestal que se encuentra en las cercanías de la ciudad de Tokyo, y en el que el pasado domingo más de 200 voluntarios llevaron acabo tareas de limpieza de hojas y malezas que impedían el crecimiento natural de la vegetación de la zona. Entre los voluntarios que se encontraban allí, se hallaba el afamado director Hayao Miyazaki, quien debe a este bosque la inspiración que luego plasmó en los escenarios de su película Tonari no Totoro.
En el año 2007, Fuchi no Mori estuvo a punto de desaparecer para dar lugar a un complejo de viviendas, que ocuparía los 5700 metros cuadrados que comprende. Pero gracias a las protestas de los residentes locales y del propio Miyazaki consiguieron detener el proyecto. Luego, ese mismo año, Miyazaki y otros colaboradores donaron la 73 millones de yenes a la ciudad de Higashimurayama para preservar el lugar.
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